Ecologistas en Acción
Nos encontramos ante otro conflicto internacional, el de la guerra en Osetia del Sur entre georgianos, y osetios y rusos. Este conflicto se sitúa en una región geoestratégica a nivel petrolero y, el reparto de alianzas a nivel internacional, también parece tener como trasfondo la guerra de Iraq y el conflicto latente iraní.
Durante los últimos días las tropas georgianas han entrado en Osetia del Sur rompiendo el alto el fuego de 1992. Como respuesta a esta actuación el ejército ruso ha entrado también en Osetia, además de bombardeado territorio georgiano.
Ecologistas en Acción considera que, para entender este conflicto, es fundamental seguir el rastro petrolero del mismo.
Por una parte, por Georgia pasa el oleoducto Bakú-Tbilisi-Ceyhan (BTC), que entró en funcionamiento hace tan solo 2 años. Este oleoducto es el único que viene de la zona del Cáucaso y no atraviesa territorio ruso, significando un ataque contra la hegemonía del gigante euroasiático en esa zona. De este modo, el ataque de Rusia sobre Georgia perseguiría debilitar dicho país, al tiempo que lanza un aviso a navegantes en ese territorio. Probablemente Rusia no se atreva a invadir Georgia para controlar dicho oleoducto, porque este acto contaría con una respuesta de Estados Unidos, apoyado por la Unión Europea.
Ecologistas en Acción
Insumissia
La reacción de Estados Unidos respondería a los lazos que, con el gigante americano, ha ido realizando Georgia. Unos lazos que tienen que ver mucho con el petróleo. Georgia tenía desplegados 2000 soldados en Iraq en apoyo a la invasión estadounidense para controlar el crudo iraquí. Una cifra muy por encima de las capacidades y el peso internacional de este pequeño país. Además el oleoducto BTC ha sido puesto en marcha por petroleras occidentales, entre las que destacan British Petroleum (británica) y Chevron y Conoco-Philisps (estadounidenses). De este modo Georgia es considerada por Estados Unidos y la Unión Europea como su principal aliado en esta zona clave en la geopolítica petrolera.
Sin embargo Estados Unidos (ni mucho menos la Unión Europea) van a pasar de las palabras a los hechos. Esto se debe a que necesitan el apoyo de Rusia en su intento de parar los planes nucleares iraníes, una zona con mayores reservas de crudo que el Cáucaso y, por lo tanto, de mayor prioridad. Además, es probable que se haya producido una negociación bajo cuerda para que el ataque de Rusia no suponga la destrucción del oleoducto BTC, ni su control por parte de dicha potencia. Haciendo un repaso de los lugares en los que existen conflictos en el mundo y superponiendo este mapa con el de las reservas petroleras, se puede observar que la coincidencia es tremenda: Colombia, Venezuela, Bolivia, Darfur, Iraq, Palestina, Georgia...
A juicio de Ecologistas en Acción, los conflictos por el control del petróleo no harán sino aumentar conforme este recurso se vaya haciendo más escaso. De este modo, no sólo por sus tremendos impactos ambientales, sino también por las guerras por su control y todo el sufrimiento y destrucción que causan, es el momento de iniciar la carrera hacia la despetrolización de nuestra economía.
Con mas razón aún....NO a la reforma petrolera, PEMEX es de los Mexicanos y de nadie más. Al igual, hagamos conciencia sobre el uso de energias limpias y disminuyamos nuestra dependencia petrolera que al final no nos llevará a ningún lado mas que a guerras y destrucción social.
http://www.antimilitaristas.org/spip.php?article3882
20.8.08
Osetia del Sur: otra guerra con olor a crudo
Publicadas por cmdtmac a la/s 9:38 a.m.